En ocasiones los
niños pueden presentar alteraciones en su estado de ánimo en los que las Flores de Bach les pueden ayudar. Los remedios estabilizan las
emociones, promueven la armonía, la motivación y un estado de ánimo positivo.
La misión del niño, desde su más tierna edad,
es aprender. Y, todas las flores del sistema floral de Bach apuntan de un modo
y otro al aprendizaje, ya sea corrigiendo un impacto emocional que sufrió el niño,
o ayudándolo a retirar de su espacio personal la energía y los obstáculos que
limitan su armonioso y feliz desarrollo.
Por ejemplo Rock Rose ayuda a los niños que entran en pánico frente a un examen
y se quedan en blanco olvidando toda la materia que sabían al detalle. Clematis y Chestnut bud ayudan a los niños con problemas de concentración y
aprendizaje, y Hornbeam es ideal
para aquellos que tienen energía para jugar pero se sienten demasiado cansados
a la hora de enfrentar las obligaciones escolares: trabajos extraclase,
preparación de exámenes etc.
Si encuentras alguna de las siguientes
características en tus hijos, puedes acudir a las Flores de Bach; un niño saludable que crece con armonía emocional será un adulto feliz y
exitoso.
Se enfada con facilidad
Tiene tendencia a estar triste o
melancólico
Tiene problemas de concentración, de
memoria, está disperso
No confía en sus propias capacidades
Es intolerante con sus compañeros
Le cuesta adaptarse a los cambios y
en general a las nuevas actividades
Tiene una actividad desmesurada, no
tiene paciencia
Tiene una baja tolerancia a la
frustración
Es muy susceptible, siente a menudo
rabia y celos
Siente ansiedad por sus familiares
cercanos
Se aísla y no comparte aficiones ni
juegos con sus compañeros
No duerme bien y tiene pesadillas
Los niños, vale la pena destacarlo, responden con mucha rapidez a los beneficios de las Esencias Florales y por lo general con resultados excelentes. Ellos simplemente quieren ponerse bien y ser felices. Tienen una actitud que encierra una gran lección de vida para nosotros los adultos
La forma más habitual de tomar
las Flores de Bach es
a partir de un gotero de cristal con cuentagotas, la llamamos toma oral. Sin embargo existen otras formas de
aplicación también muy eficaces:
La aplicación en forma de ambientador
es una de ellas y es tan simple como preparar un frasco de plástico con difusor
de spray, al que le podemos incorporar agua y las gotas de algunas de las Flores de Bach indicadas para armonizar
el ambiente de distintos espacios de nuestras casas; puede ser especialmente
útil en los dormitorios, sobre todo si los niños se han sentido tensos por los
retos escolares, demasiado hiperactivos, tienen miedo a la hora de ir a dormir
o se despiertan por alguna pesadilla.
Las esencias florales también se preparan en una base de crema a la que añadimos las Flores de Bach específicas para cada caso o situación en concreto, aplicándose directamente sobre la piel. Por ejemplo para golpes, quemaduras, choyaduras o si hay dolor en alguna zona determinada del cuerpo, y también son muy eficaces en problemas de la piel.
Aspen
y Holly son dos de los
remedios florales que podemos utilizar para armonizar ambientes; también se
puede agregar esencia de Delfines
que es maravillosa para limpiar y armonizar las habitaciones
La anterior información es únicamente de carácter
orientativo e informativo. Cada niño necesita un tratamiento individualizado,
que debe ser prescrito por un terapeuta floral acreditado.